Tantos años llevo andando con la bici por el recorrido de mi pueblo, que no pude sino hacer alusión al pedalear, cuando tuve que pensar en ponerle un nombre a mi quehacer. En esta labor que realizo, que es la terapia mediante el arte, siento que pedaleo siempre, buscando rumbos, experiencias y aprendizajes, que hagan sentido a otres para sus propios procesos y caminos.

Trabajo con adolescencias, mujeres, LGBTIQ+ y adultas mayores. Especialmente recibo adolescencias y mujeres con dentro del Espectro Autista con necesidad de apoyo en elaboración de emociones, comprender el mundo que nos rodea, fortalecer recursos personales y formas de expresión. Este mundo es muy interesante para mí pues yo misma pertenezco al mundo de la neurodivergencia, en el espectro autista, y es mi sentir que puedo colaborar con los aprendizajes que he adquirido con los años.